Mira Murati, la jefa de tecnología de OpenAI, ha emergido como una de las figuras más destacadas de Silicon Valley, liderando el desarrollo de tecnologías innovadoras como ChatGPT. Originaria de Albania, uno de los países más pobres de Europa, Murati ha superado desafíos desde una infancia marcada por la transición del comunismo al capitalismo.

Con una beca a los 16 años, Murati se trasladó a Canadá para estudiar y más tarde se sumergió en el mundo tecnológico en Tesla, donde contribuyó al desarrollo del Modelo X y AutoPilot. Su trayectoria la llevó a OpenAI en 2018, donde desempeñó un papel clave en la creación de tecnologías revolucionarias como ChatGPT y Dall-E.

Nombrada una de las 100 mujeres más poderosas por la revista Fortune, Murati ha demostrado su capacidad para liderar equipos técnicos y forjar colaboraciones estratégicas, especialmente con Microsoft. En su visión del futuro de la inteligencia artificial, destaca la importancia de regular las “capacidades peligrosas” y anticiparse a los cambios que esta tecnología provocará en la sociedad.

A pesar de su optimismo, reconoce los desafíos éticos y de gobernanza asociados con la inteligencia artificial. Murati aboga por la colaboración entre empresas, gobiernos y reguladores para abordar estos problemas y garantizar un desarrollo responsable de la inteligencia artificial, que según ella, transformará industrias enteras y afectará la política internacional.