Lee Sang-Hyeok, más conocido como Faker, lleva la leyenda de ser el mejor jugador en la historia del League of Legends. Con tres títulos de campeón del mundo en su haber, este maestro de la estrategia y habilidad se encuentra en la búsqueda de su cuarta victoria en el mundial de este año.

En esta ocasión, Faker se encuentra en una situación única: está compitiendo en su tierra natal, Corea del Sur. Es el primer mundial que disputa en su país, lo que le otorga un valor especial a la competición. Sin embargo, su camino hacia la victoria no será fácil. Como único representante coreano en el torneo, se enfrenta a un desafío formidable, especialmente contra equipos chinos, a quienes ya derrotó en los Juegos Asiáticos.

A pesar de que el mundo de los esports tiende a ver el retiro temprano de sus estrellas, Faker ha desafiado todas las expectativas. Lleva diez años en la cima de su juego y está a solo dos pasos de hacer historia como el primer jugador en ganar cuatro títulos mundiales. Su apodo, “El Rey Demonio”, es más que merecido, y su presencia en las semifinales demuestra una vez más su determinación y habilidad excepcional.

Enfrente, se encuentra el formidable JD Gaming, el actual campeón chino y claro favorito. Sin embargo, en enfrentamientos anteriores, como contra LNG, el segundo equipo más fuerte de China, T1 demostró su superioridad con una victoria cómoda de 3-0. Este próximo domingo, Faker tiene otra oportunidad de alcanzar la cima, dejar una marca imborrable y buscar su lugar como el campeón mundial indiscutible.